martes, 15 de marzo de 2011

El arte de tomar decisiones


Con el paso de los años me he dado cuenta que no siempre es tan fácil tomar algún tipo de decisión, a veces no se trata solamente de pensar qué hacer el fin de semana, dónde pasar el año nuevo, o si cambiarme o no el look de cabello. A veces se trata de decisiones tan relevantes que pueden cambiar radicalmente el rumbo de la vida como se conoce.
La toma de decisiones es un proceso mediante el cual se realiza una elección entre una o varias alternativas o formas para resolver diferentes situaciones de la vida, y estas se pueden presentar en diferentes contextos: a nivel laboral, familiar, sentimental, etc., es decir, en todo momento se toman decisiones, la diferencia entre cada una de estas es el proceso o la forma en la cual se llega a ellas. La toma de decisiones consiste, básicamente, en elegir una alternativa entre las disponibles*.
He conocido dos tipos de personas: las que toman decisiones impulsivamente, se lanzan sin pensar y arriesgan el todo por el todo, dicen sí y sin analizarlo detenidamente se atienen a las posteriores consecuencias; muchas de estas personas saborean los beneficios de una decisión bien tomada, sin embargo, en otras ocasiones dicho sabor resulta ser amargo, y tras un tiempo de remordimiento y hasta culpabilidad se buscan alternativas para solucionar o reparar lo ejecutado.
Por otro lado, están aquellas personas con las que suelo identificarme, que piensan, analizan, y le dan vueltas y vueltas y más vueltas a algún asunto, dificultando la acción que conlleva determinar algo. Y es posible que nunca se tome la decisión y se actúe, debido quizá al temor de fracasar o cometer errores. Si bien es cierto, puede que esto ahorre la fatiga, pero muchas veces se ven pasar de largo las oportunidades, y lo que tortura aun más, se ve cómo otra persona que sí se arriesgó un poco más le resultó una buena decisión. 
            Ante toda situación se debe buscar el equilibrio, por eso aquí se apuntan algunos pasos sencillos, básicos para tomar buenas decisiones:

1. Esté consciente que cada decisión que se tome tiene consecuencias, todo funciona según la ley de “causa y efecto”, además recuerde que no todo va a ser “color de rosa”, el haber tomado la mejor decisión no significa que no vaya a haber momentos difíciles o de duda.
2. Pida consejos, consulte personas que ya hayan superado o vivido una circunstancia similar a la suya, que tenga conocimiento y experiencia en el tema.
3. Para tomar buenas decisiones es importante tener la mayor cantidad de información verídica posible.
4. Haga una lista de posibles consecuencias ante cada una de las alternativas; analice los pros y contras.
5. Piense ¿qué es lo mejor y lo peor que podría ocurrir? de acuerdo a cada alternativa, y prepárese para esto, tenga planes B, C, D y todos los que sean necesarios.
6. De acuerdo a lo observado piense qué concuerda mejor con su proyecto de vida, su familia y planes. Recuerde no sólo pensar en el beneficio personal, piense en el bien de su familia y los demás, sus decisiones los afectarán a ellos también, positiva o negativamente.
7. Tome la decisión y manténgase firme en ésta.

          Si bien sabemos, estos puntos puede que sea útiles para hacer menos complejo el proceso de elección, sin embargo, es importante ante todo buscar la PAZ y seguirla, dedique tiempo a meditar a solas con Dios, El conoce nuestros pasos, el pasado, el presente y el futuro. Si ante una posibilidad se siente la mínima incomodidad es mejor postergar la decisión y continuar esperando hasta que sintamos tranquilidad.
          Este es un proceso continuo y de nunca acabar, va a haber momentos en los que veamos buenos resultados, y sepamos que alguna decisión que se tomó fue la correcta y resultó aún mejor de cómo se había pensado, por el contrario, va a haber momentos en los que, aún creyendo que estamos haciendo lo correcto, con el paso del tiempo veamos que no fue así. Por eso no nos podemos desaminar, sino sacarle provecho, todas son oportunidades para aprender y crecer.
         En la vida gran cantidad del aprendizaje es por ensayo y error, por eso aceptemos los errores y aprendamos de ellos, ya que cometerlos es una característica y un derecho que como seres humanos tenemos, y a aun más importante disfrutemos los éxitos y las buenas decisiones, sabiendo que lo que tenemos es porque nos ha sido dado del cielo.


*http://es.wikipedia.org/wiki/Toma_de_decisiones

martes, 8 de marzo de 2011

Consejos para evitar la ansiedad y el estrés

El Instituto Francés de la Ansiedad y el Estrés definió algunas reglas de vida para reducir y prevenir la ansiedad y el estrés, así como para mejorar la calidad de vida:

1) Haga una pausa de mínima de 5 a 10 minutos por cada 2 horas de trabajo, a lo máximo. Repita estas pausas en su vida diaria y piense en usted, analizando sus actitudes.

2) APRENDA a DECIR NO, sin sentirse culpable, o creer que lastima a alguien. Querer agradar a todos es un desgaste enorme.

3) PLANEE su día, pero deje siempre un buen espacio para cualquier imprevisto, consciente de que no todo depende de usted.

4) CONCÉNTRESE en apenas una tarea a la vez. Por más ágil que sean  sus cuadros mentales, usted se cansa.

5) OLVÍDESE de una vez por todas de que usted es indispensable en su trabajo, su casa o su grupo habitual. Por más que eso le desagrade, todo camina sin su actuación, salvo usted mismo.

6) DEJE de sentirse responsable por el placer de los otros. Usted no es fuente de los deseos, ni el eterno maestro de ceremonia.

7) PIDA AYUDA siempre que sea necesario, teniendo el buen sentido de pedírsela a las personas correctas.

8) SEPARE los problemas reales de los imaginarios y elimínelos, porque son pérdida de tiempo y ocupan un espacio mental precioso para cosas más importantes.

9) INTENTE descubrir el placer de cosas cotidianas como dormir, comer y pasear, sin creer que es lo máximo que puede conseguir en la vida.

10) EVITE envolverse en ansiedades y tensiones ajenas, en lo que se refiere a ansiedad y tensión. Espere un poco y después retorne al diálogo y a la acción.

11) SU FAMILIA NO es usted, está junto a usted, compone su mundo, pero no es su propia identidad.

12) COMPRENDA qué principios y convicciones inflexibles pueden ser un gran peso que eviten el movimiento y la búsqueda.

13) ES NECESARIO tener siempre a alguien a quien le pueda confiar y hablar abiertamente. No sirve de nada si está lejos.

14) CONOZCA la hora acertada de salir de una cena, levantarse del palco y dejar una reunión. Nunca pierda el sentido de la importancia sutil de salir la hora correcta.

15) NO QUIERA saber si hablaron mal de usted, ni se atormente con esa basura mental. Escuche lo que hablaron bien de usted, con reserva analítica, sin creérselo todo.

16) COMPETIR en momentos de diversión, trabajo y vida en pareja, es ideal para quien quiere quedar cansado o perder la mejor parte.

17) Una hora de INMENSO PLACER sustituye, con tranquilidad, tres horas de sueño perdido. El placer recompensa más que el sueño. Por eso, no pierda una buena oportunidad de divertirse.

18) NO ABANDONE sus tres grandes e invaluables amigas. Intuición, Inocencia y Fe.

19) ENTIENDA de una vez por todas, definitivamente y en conclusión que Usted ES LO QUE USTED HAGA de USTED MISMO.

20) Piensa... Reflexiona... Practica... COMO PROLONGAR LA VIDA.

21) Elimina de tu vida los números que no son esenciales. Esto incluye, edad, peso y altura. Deja que tu médico se preocupe por ellos. Para eso le pagas.

22) Mantén amistades alegres. Los gruñones te bajan el ánimo.

23) Intenta aprendiendo cosas nuevas. Aprende más sobre computadoras, manuales, jardinería, lo que sea.

24) Nunca permitas que tu cerebro sea holgazán.

25) Disfruta de las cosas simples. Ríe más a menudo, fuerte y por largo tiempo.

26) Ríe hasta que te quedes sin aire.

27) Las lágrimas son naturales. Súfrelo, laméntalo y luego sigue adelante.

28) Rodéate de cosas que amas, ya sea la familia, mascotas, música, plantas, pasatiempos, lo que sea.

29) No te enrolles en un viaje de culpabilidad. Tómate un viaje a otro país, al centro comercial o a otro pueblo cercano, pero NO a donde te lleve la culpa.

30) A las personas que amas, DÍSELO en cada oportunidad que tengas.

Y SIEMPRE RECUERDA:
VIVE Y SE FELIZ!

viernes, 4 de marzo de 2011

¿PSICOLOGÍA?

Esta es una de las primeras veces en las que me dedico a pensar con mayor profundidad sobre qué constituye para mí la psicología, ¿si de ella se obtienen beneficios personales, sociales o simplemente existe de por medio un interés económico o de prestigio?

Entre las ideas que vienen a mi mente es una frase que una psicóloga amiga me había dicho hace ya algún tiempo: “la psicología consiste muchas veces en darle felicidad a las personas”; aunque particularmente creo que asignarnos tal responsabilidad es una osadía, esta es una idea que se apega en gran manera.

Uno de los principios con los que más me identifico mucho es la congruencia entre lo que se dice y se hace, y aunque aspirar a ser enteramente congruente en la vida resulta muchas veces imposible, sí considero esencial el constante trabajo propio, la sanidad mental y espiritual, y éstas no solamente para beneficio personal, sino también para el bienestar del paciente mismo; creo que esta es una de las razones por las que me gusta tanto la psicología. La vida no es para soportarla, o para sobrellevarla mientras dure, y muchas veces la función del terapeuta es enseñar a la persona a vivir mejor, a tener calidad de vida, aun desde lo más básico.

¡Cuánta gente tiene problemas por no saber expresar el afecto o la disconformidad, por no poder sostener una conversación o simplemente por llevar estilos de vida no saludables! por ejemplo, pensando que divertirse es llegar a la casa a las tres de la madrugada alcoholizado, o trabajando tanto que no se “tiene tiempo” la familia o para sí mismo. Una de las funciones de la psicoterapia es quitar todos esos esquemas deformados y empezar a trabajar en aspectos un poco elementales como lo son el tiempo libre, el ejercicio, el sueño, la comunicación.

Desde la experiencia me he dado cuenta del poder curativo que tiene el hablar. La demanda que los pacientes hacen es, en gran medida, de alguien que les escuche sin censuras o juicios, es tener un ambiente para conversar de aquello que les inquieta o preocupa y nuestra función se limita a escuchar empáticamente, más que dar la respuesta exacta a los problemas temporales, u ofrecer las técnicas más novedosas que alivien permanentemente su dolor.

El simple hecho de estar a la disposición del individuo y ofrecer nuestra compañía en momentos de crisis, o dar una frase alentadora, brinda al paciente una esperanza, y particularmente creo que este es uno de los mejores aportes que como terapeutas se puede ofrecer; la esperanza de un mejor futuro, la esperanza de que trabajando juntos y esforzándonos se puede salir adelante.

Una de las mayores satisfacciones es ver cómo esa persona que originalmente parecía sin ánimo ni ilusiones sale con mayor expectativa, con una esperanza que la motiva a continuar su camino. Ver cómo, poco a poco, su semblante cambia y se empiezan a notar sonrisas en su rostro y, aunque la realidad continúe estando difícil, la actitud de esa persona ante las circunstancias cambie y mejore.

Como psicólogos se puede pretender alcanzar todo el conocimiento humano posible, sin embargo, no es hasta que nos vemos confrontados con la realidad en la que viven muchas personas que logramos comprender con nuestro corazón la verdad de las situaciones que nos rodean, las cuales son increíblemente distintas y particulares. No es hasta que éstas nos sea caladas en nuestro ser que adquirimos la verdadera experiencia, no con el simple conocimiento racional que ofrece la teoría, sino con la completa identificación e involucramiento de la realidad que día a día experimentan las personas, y este se alcanza, en alguna medida gracias a la psicología.

La vida tiene mucho más valor cuando se beneficia y bendice a otros!